Una manada de muchachos franceses salieron copeteados de un bolichín, se afanaron una llama de un circo, siguieron la caravana y la dejaron atada a un poste. Terminaron todos en cana, pero son re popus en Facebook.
Se trató de cinco flacos de Bourdeaux, que cumplieron el sueño del pibe: viajar en tranvía con una llama. También sacaron del circo un león (de peluche).
Inmediatamente, fue un boom en las redes sociales. Pero como siempre sucede en este injusto mundo, los ignotos franceses y Serge, como fue apodada la llama, pasaron al ostracismo del olvido. Cosa que nunca hubiera sucedido con una llama argentina:
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Por: Elor Torroto
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